Presentación de Luis Altarejos García.
Para empezar cuéntame sobre tus viajes de trabajo: ¿dónde trabajaste y cómo fue?
Después de la crisis en 2008, las inversiones en nuevas infraestructuras en España se redujeron drásticamente, por lo que las empresas españolas en el sector tuvieron que buscar oportunidades en los mercados internacionales. Parte de la profesión encontró un mundo de oportunidades y tuve la ocasión de ser parte de proyectos interesantes y desafiantes, incluyendo proyectos en países en desarrollo financiados por instituciones multilaterales como el Banco Mundial. Como consultor energía hidroeléctrica, presas e infraestructuras relacionadas con el agua, he tenido también la oportunidad de participar en proyectos en varios países de Europa, América, África y Asia.
Cuando vas a algún país extranjero para trabajar en un proyecto, ¿visitas el lugar de forma turística o es estrictamente un viaje de trabajo?
Bueno, si viajo por motivos de trabajo, dedico la mayor parte de mi tiempo al proyecto. La organización del tiempo es diferente en un viaje de trabajo que en vacaciones. Realmente no tengo tanto tiempo para el turismo.
Eres una persona muy ocupada, enseñas en la Universidad, escribes artículos académicos y colaboras en proyectos internacionales. ¿Cómo administras tu
Todo lo que hago está conectado. Creo que es difícil enseñar algo, especialmente en ingeniería, si no tienes una experiencia real y práctica. La experiencia del mundo real me proporciona información de las lagunas actuales en mi área de conocimiento, hacia las cualespuedo orientar mi investigación. De esta forma puedo transferir este conocimiento y mi experiencia a los estudiantes.
¿Cómo ves el futuro de tu profesión en los jóvenes a los que enseñas? ¿Te los imaginas como buenos expertos?
Recuerdo que entré en el aula para mi primera clase, en 2005, y creo que estaba bastante nervioso. Mi clase iba después de la de D. Vicente Fullana, que había sido uno de mis profesores. Nos encontramos en la puerta del aula, y cuando se enteró de que iba a ser mi primera clase, me dijo: "Sólo te daré un consejo: al principio puede parecer que nadie entiende nada. Pero recuerda, siempre hay alrededor del 5-10 % de los estudiantes que te seguirán perfectamente y que incluso irán por delante de tí Da lo mejor de ti para todos, pero trata de mantener a esta gente a bordo". Y tenía razón, estoy convencido de esto cada año.
¿Qué es el trabajo para ti? ¿Está presente en tu vida todo el tiempo, u organizas el tiempo cuando no piensas en esto?
Vivimos una vida basada en la tecnología, que en este caso es una gran desventaja por estar conectado todo el tiempo, ya que incluso al terminar de trabajar al final del día, alguien puede escribir un mensaje, recordando algo que hay que terminar. Por otro lado, disfruto mucho con mi trabajo. Hace años el gerente de una de las compañías de consultoría de ingeniería civil más grandes del mundo dijo: "Fuimos bendecidos con uno de los mejores trabajos del mundo: cada día es diferente", lo que totalmente cierto este tipo de trabajo nunca es aburrido. Todos los proyectos son diferentes, y eso es muy interesante. Se trata de resolver problemas, un poco como Sherlock Holmes, quien, por cierto, fue uno de los primeros Consultores de la historia moderna, aunque fuera en un mundo literario.
Sin embargo, creo que separo mi trabajo de la vida personal. Cada vez que tengo tiempo libre con mi familia, me concentro en eso y lo disfruto. Por supuesto, si quieres ser el mejor en cualquier cosa, has de sacrificar otros intereses, pero ése no es mi caso. Citando a un personaje de la novela “El olvido que seremos” de Héctor Abad Faciolince: en la vida de todos, llega el momento en el que uno tiene que elegir si quiere ser famoso o ser feliz. Ser famoso significa sacrificar casi todo por el trabajo, y ser feliz significa encontrar el equilibrio. En la novela, los sabios son aquellos que encuentran el equilibrio, y eligen ser felices.
¿Tus viajes, en general, te enseñaron algo especial sobre de las personas?
En cada país el trabajo es diferente. Por supuesto, siempre trabajamos sobre la misma base, pero los proyectos se gestionan con matices diferentes según donde estés.. A veces la primera impresión es que hay diferencias en la forma de organización del trabajo que pueden parecer extrañas bajo nuestro punto de vista, pero rápidamente se da uno cuenta de que las personas saben muy bien lo que hacen y nos adaptamos a ello.
Lo fundamental es entender la diversidad y el contexto en el que vives. Lo que he aprendido es que no se debe prejuzgar las capacidades o el talento de nadie, y que esto también se aplica a nosotros. Siempre les digo a mis estudiantes que no tengan complejos y que no hay motivo para no se sientan tan buenos como el que más.